sábado, 6 de agosto de 2016

Sebastián Borensztein: "Será un gran año de Festival"

Luego de finalizar la primera jornada del ciclo “Camino al Festival”, Marpla Noticias dialogó mano a mano con las principales figuras que protagonizaron el encuentro que tuvo lugar en el Teatro Auditorium. Reviví las notas.


“Creo que van a tener un gran año de Festival. Va a estar ‘reloaded’, va a estar muy bueno”, aseguró en sus primeras declaraciones a Marpla Noticias, el reconocido director argentino Sebastián Borenzstein, luego de que ayer se inaugurase el ciclo que ya palpita lo que será la nueva edición del certamen a desarrollarse desde el próximo 18 de noviembre hasta el 27 de septiembre en la ciudad.

Sentados en sus butacas, como si fueran dos espectadores más, Borensztein y el “maestro” José Antonio Martínez Suárez, director del Festival Internacional de Cine marplatense, se sumaron al público presente para disfrutar de las destacadas producciones nacionales “Un cuento chino” (Borensztein) y “Sin sabor” (Pablo Pérez), ya premiadas en anteriores ediciones de la competición.


Sin embargo, pese a las presencias de renombre que habían sido anunciadas para la fecha y la calidad de las películas proyectadas, la primera jornada de “Camino al Festival” se vio opacada por la escasa cantidad de personas que se acercó ayer a la tarde hasta la sala Astor Piazzolla del Teatro Auditorium, lo que dejó una sensación de “sabor a poco” al evento.

Es probable que no haya sido desinterés lo que motivó el gran ausentismo, sino los inconvenientes que exceden totalmente a la organización pero que, al mismo tiempo, tampoco permanecen ajenos a la misma. A raíz de la retención de tareas por 24 horas que había sido decretada desde el Sindicato de Trabajadores Municipales, debió cambiarse de sede a última hora, ya que estaba previsto que el ciclo se desarrollase en el Teatro Municipal Colón.


En este sentido, José Martínez Suárez dijo estar “satisfecho” con la sala y la cantidad de público concurrente, pero no ocultó su enojo y malestar por la decisión tomada por los empleados de la comuna: “Me parece una actitud absolutamente negativa. Si hay algo que tiene que hacer el gremialista es afianzar la cultura. Esto es un acto cultural, no gremial”.

En cuanto a su preponderante rol como director del Festival, Martínez Suárez aseguró que es “la tarea más difícil” que ha tenido que cumplir pero que por eso mismo es “la más linda”. “La hago con todo esfuerzo pero también con toda voluntad y alegría”, dijo y agregó: “es un placer personal el de exhibir películas que son aplaudidas, comentadas y elogiadas”. 

Respecto a sus expectativas para la próxima edición del certamen internacional, manifestó que son “mejores que las del año anterior” y que tiene el deseo de que “todas las programaciones sean superiores para que el público salga satisfecho y con ganas de contar la película al primer amigo que encuentre”.



En la misma sintonía se expresó Sebastián Borensztein, quien también se refirió a su último trabajo cinematográfico, “Koblic”: “Hizo una muy linda performance. Es una película muy dura. Tuvimos 300 mil espectadores, una suma muy grande para nuestro cine. La gente tiene mucha reticencia a acercarse a películas que abordan periférica o tangencialmente el tema de los años oscuros de la Argentina, de la dictadura. Estamos muy contentos con la calidad de la película y con los elogios que hemos recibido”. 

En referencia a sus futuros proyectos, el director señaló que todavía nada de lo que se encuentra haciendo “tiene nombre y apellido”. “Ahora estoy con el trabajo que hago constantemente, que es el de escribir y tirar a la basura. En algún momento decidiré que algo no vaya a la basura y que se pueda llegar a convertir en una película. Estoy como en la cocina creativa todo el tiempo”, explicó.

Además de Pablo Pérez, el director del cortometraje “Sin Sabor”, otra de las figuras destacadas de la fecha tuvo lugar con la sorpresiva aparición del actor de origen taiwanés, Ignacio Huang, quien formó parte del elenco de “Un cuento chino”, junto a los actores Ricardo Darín y Muriel Santa Ana.



El joven intérprete dijo que la oportunidad de trabajar en la película dirigida por Borensztein fue como el “trampolín” que lo lanzó a la “fama”. “Tuve que aprender a cómo comportarme y convertirme en un personaje público”, confesó Huang en diálogo con Marpla Noticias.

“Al principio no sabía ni quién era Sebastián Borenzstein hasta que me dijeron que era el hijo de Tato, imagínate. Empecé a valorar lo que me pasó. Fue como la historia de la Cenicienta. Es muy lindo cuando la varita mágica de la vida te toca. Fue otra experiencia, fue transformador. Espero que en el futuro pueda seguir trabajando con Sebastián en otra producción”, dijo el actor.

(*) Cobertura periodística a cargo de Ezequiel Chamorro y Bruno Perrone.