lunes, 22 de febrero de 2016

A solas con Diego Perez y Marcelo Mazzarello


Perro Que Habla continúa su recorrido por los teatros marplatenses y en esta oportunidad, el turno fue para "Mamá decía". Los protagonistas de la entretenida obra producida por Aldo Funes, que estará hasta Semana Santa en el refaccionado Teatro Santa Fe (Santa Fe 1854), dialogaron en exclusiva con nosotros luego de la función.

No importa de lo que hable Mauri, la respuesta de su hermano siempre será la misma: "Mamá decía...". Con ese estribillo que el "Chiqui" repite y repite hasta el cansancio, con esos hermanos antagónicos, y en una suerte de living desordenado, nace la obra escrita por Alicia Muñoz para hacer reír y demostrar que los lazos familiares no entienden tiempos ni distancias.

Diego Perez (Mauri) y Marcelo Mazzarello (El "Chiqui") encarnan a dos hermanos cuyo contraste es evidente desde un principio. Criado por su padre, Mauri es el típico empresario de ciudad: vida acelerada, problemas sin respuestas y, por supuesto, mala suerte con los negocios y las mujeres. El "Chiqui", en cambio, es simple, inocente, campechano. Su vida se resume fácil: el campo, los animales y "mamá".

El "choque de esos dos mundos" es muy gracioso por momentos pero no puede ocultar el dolor que comparten los hermanos ante la pérdida de sus referentes. En ambos, es indudable que la ausencia de sus padres no es más que física: los extrañan y necesitan tanto que, en definitiva, se hacen más presentes que nunca en sus recuerdos y pensamientos.


Por eso "Mamá decía" llega de otra manera al público. Porque más allá de ser una comedia y tener esa dosis de humor necesaria del género, cuenta también con cierta cuota de nostalgia y tristeza que da otra clase de contenido a la obra. "Toca temas que a todos de alguna manera nos llegan: los padres, los hermanos, los vínculos familiares, el lugar de la tierra de uno. Eso hace que cause mucha gracia y que a la vez tenga momentos de emoción", explica Diego.

Con personajes hechos prácticamente a su medida, Perez y Mazzarello no necesitan de mayores esfuerzos para su interpretación. Y a pesar de ser su primera experiencia juntos, arriba del escenario se complementan como si fueran una dupla consagrada. "Fue como encontrar a alguien con quien coincidís en todo, como encontrar un dúo, algo que funciona solo. Es un hallazgo", dice Mazzarello.

En el mismo sentido se manifestó Diego Perez, que señala que para él fue como si hubieran "trabajado juntos toda la vida". "Hay muy buena química, somos muy buenos compañeros. Somos también de salir a comer juntos. La verdad que se ha generado una buena química dentro y afuera del escenario", revela.


Por su papel en "Mamá decía", Mazzarello, que confiesa que sólo quiere "hacer tiempo hasta el verano que viene para volver a Mar del Plata", recibió el prestigioso Estrella de Mar como mejor Actuación Protagónica Masculina de Comedia. "Fue sorprendente porque competíamos con obras grandes y con producciones muy importantes. Pero por suerte nos galardonaron a nosotros y estamos muy contentos".

Diego, que tampoco oculta la "felicidad" que le genera venir a la ciudad, se refirió a la particular temporada marplatense. Sin ahondar en demasiadas cuestiones políticas, reconoció al "cambio de gobierno" como un factor que incidió de manera determinante en el turismo que tradicionalmente elige a Mar del Plata para sus vacaciones de verano.

"Creo que arrancó de a poquito y fue 'in crescendo'. Hubo un cambio de gobierno muy importante en el país, la gente no sabía qué era lo que iba a suceder. Algunos ya tenían las vacaciones compradas en Brasil y entonces al principio la gente fue cautelosa. Febrero cambió muchísimo, y Mar del Plata se llenó mucho más. A casi todos nos fue mejor", sostuvo.

Marcelo Mazzarello y Diego Perez con el productor general de "Mamá decía", Aldo Funes.
Respecto a los planes para este 2016, Perez adelantó la intención de volver con esta obra "todos los fines de semana largo y en vacaciones de invierno". De ser así, se sumaría para el resto del año una alternativa fresca y distinta en la cartelera teatral de la ciudad. Porque siempre es linda la comedia, pero más linda es cuando invita con sus recursos a la reflexión.